La Fundación de Ayuda a la Investigación del Daño Cerebral tiene su sede en Oviedo pero se constituye a nivel nacional. Nace como respuesta a la necesidad de ayudar tanto a la investigación sobre el daño cerebral como de desarrollar estrategias que mejoren la calidad de vida de aquellos afectados por daño cerebral así como de sus familias.
Este año la Fundación AINDACE, en Oviedo, cumple cuatro años desde su nacimiento y por ello nos hemos planteado: ¿Qué significa colaborar con la Fundación AINDACE?
Al ser una entidad sin ánimo de lucro, la financiación de la que disponemos se destina casi en un 50% a actividades y talleres y otro gran porcentaje se destina a gastos de personal que no sólo nos permiten seguir realizando estas iniciativas sino que contribuyen con la gran labor de mejorar la calidad de vida tanto física como mental de nuestros asociados.
Pero… ¿realmente necesito invertir en la investigación del daño cerebral si no me afecta directamente? La respuesta es SÍ, por dos motivos fundamentales:
-El primer motivo es la solidaridad: Si únicamente colaborasemos o contribuyésemos con aquello que nos afecta de manera directa sin pensar en aquellos colectivos más desfavorecidos de alguna manera estamos perpetuando esa situación. Una cadena de solidaridad, contribuir y compartir con aquellos que no disponen de los recursos, medios o herramientas necesarios para mejorar su situación es fundamental para caminar hacia una sociedad más cooperativa y empática.
-El segundo motivo es tu futuro: Existen distintos tipos de daño cerebral, algunos de ellos se suceden antes de nacer o en el momento del parto, e incluso unos meses después, sin embargo, existe un daño cerebral propio de las enfermedades cerebrales que se desarrollan que es el daño cerebral adquirido tal y como son los accidentes que en ocasiones provocan traumatismos cranoenfefálicos, el Ictus, el Alzheimer o la Esclerosis Múltiple. Nadie nos asegura que este problema no vaya a afectarnos de manera directa o indirecta en algún momento de nuestras vidas. Así que, reflexionemos, ¿No nos gustaría que la investigación hubiese avanzado para entonces? ¿No nos gustaría que los investigadores hubiesen tenido los recursos suficientes para conocer la enfermedad y desarrollar una cura? Por eso, muchas veces decimos que invertir en la Fundación AINDACE es invertir en el futuro de tu salud.
Las principales fuentes de financiación de la Fundación AINDACE provienen por parte de los asociados que colaboran con aportaciones voluntarias mensualmente y de las distintas actividades y talleres que organizamos a lo largo del año.
Por ello, la importancia de nuestros asociados no sólo reside en participar en las múltiples actividades y convenios que ofrecemos o en mantener la Fundación viva sino que son la herramienta que nos permite seguir investigando y luchando para visibilizar el daño cerebral, trabajar por la integración y contribuir a la investigación y a la mejora de la calidad de vida de aquellos que lo padecen.
Tú también puedes aportar tu granito de arena y ser solidario a la vez que inviertes en el futuro de tu salud cerebral. ¿Y tú, colaboras?
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